Se acerca Semana Santa y es un buen momento para aprovechar y tomarse unas mini vacaciones. Para muchos armar una valija se convierte en un dolor de cabeza.
La clave para que no falte ni sobre nada es pensar bien cada una de las cosas que vamos a llevar. Tenemos que llevar prendas que realmente nos gusten y usemos a diario, evitando llenar la valija con cosas "por las dudas".
Nunca está de más armar una lista con los ítems a llevar. Para poder planificar correctamente se pueden hacer conjuntos prácticos día por día, incluyendo accesorios y zapatos. Una misma prenda puede servir para armar dos conjuntos diferentes.
Siempre hay que acomodar las prendas más pesadas y grandes al fondo de la valija y las más sensibles a arrugas arriba. Las bolsas de plástico son buenas aliadas, ya que sirven para guardar la ropa sucia y los zapatos que muchas veces arruinan o manchan las prendas. Los zapatos se pueden colocar rellenando los huecos de la valija o arriba de todo.
Para aprovechar cada centímetro de la valija es aconsejable guardar ropa interior, pañuelos o pares de medias dentro de carteras, zapatos o algún bolsillo de la valija.
Cada prenda tiene una manera de doblarse para que llegue en buen estado y evitar que se arrugue. En el caso de sacos o camperas, colocar las mangas hacia dentro de la campera y luego dar vuelta toda la prenda para que el forro quede del lado de afuera o doblar la prenda por la mitad.
Los pantalones se deben guardar enfrentando cintura con botamangas y, en el caso de las camisas, abrochar todos los botones, apoyar la camisa boca abajo, doblar las mangas en una línea a la altura de los hombros y luego doblar por la mitad debajo de la línea de cintura.
Antes de cerrar la valija hay que revisar bien todo para que no se escape nada. Listo!, ya estamos preparados para comenzar nuestro viaje.
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